The last of us, opinión.

Hace ya varios años que jugué por primera vez The last of us, y no me gustó. Recientemente, con la publicación de su segunda parte, se ha vuelto a hablar del mismo y, de nuevo, se ha vuelto a alabar como un juegazo. Y yo, que al parecer soy mucho más influenciable de lo que creía, me lo he pillado para darle otra oportunidad; que quién sabe, mi forma de ver las cosas ha cambiado, puede que ahora si me guste...

Pero empecemos por el principio. El primer contacto que tuve con él fue hace años, cinco o seis, cuando un colega me habló de él y de sus maravillas: una historia apasionante, un juego guapísimo. Leí alguna opinión en internet y todo el mundo coincidía, gran historia, juegazo; así que se lo pedí prestado a este colega. En su momento no me gustó demasiado y me pareció sobrevalorado, pero los gustos cambian, la forma en que vemos las cosas también lo hace y todos merecemos una segunda oportunidad.

Esa segunda oportunidad

Pues nada, después de mucho pensarlo lo compré por 9.99€ en la store y me dispuse a jugarlo, sabiendo que no me había gustado en su momento y con cero expectativas pero intentando tener la mente abierta para abrazar la tan aclamada genialidad. Y al principio la cosa no fue mal, me estaba medio entreteniendo, y más siendo consciente de que los juegos donde su principal mecánica es el sigilo no son de mi agrado, pero oye, ni tan mal, hasta Pittsburgh me estaba resultando más o menos entretenido.

Y aquí es donde reside el principal problema que tengo con este juego, me acaba resultando tedioso. Me intento explicar, The last of us está estructurado de una forma muy bien definida (hay alguna excepción, pero es puntual) en cuanto a jugabilidad que podría dividirse en tres partes: avanzas - hay una sección de combate - registras.

En el avance nos desplazamos por el escenario sin preocupación alguna, rebuscamos para encontrar recursos y coleccionables y la trama se desarrolla o tenemos diálogos que aportan algo de riqueza a los protagonistas.

En los combates llegamos a una zona donde para poder continuar tenemos que superar enemigos que nos lo van a intentar impedir (ya sean infectados o humanos) y tenemos que eliminarlos sin que nos detecten o liarnos a tiros si no nos queda otra. Siempre tenemos la opción de intentar evitar a los enemigos y avanzar, pero entonces perderíamos una parte muy importante, que es...

El registro. Una vez has despejado la zona de enemigos puedes registrar la zona tranquilamente en busca de recursos, y te van a hacer falta, sobre todo la munición, porque no sobra. Por supuesto, tienes la opción de registrar todo lo que puedas mientras los enemigos siguen rondando por los alrededores, pero es muy probable que acabes muerto.

Y así es el juego, una y otra vez, y otra, y otra, y otra. Durante unas 15 horas que me ha durado he hecho lo mismo una y otra vez, sin apenas variante, sin ninguna emoción ni acontecimiento en el juego que consiguiese despertarme sacarme del tedio al que esta repetición incesante me había llevado.

Y para mi este es el mayor lastre del juego, el juego en sí.

Por otro lado tenemos la trama, esa historia que tantas pasiones ha despertado y que a mi solo me ha resultado "correcta".

Intentando se lo más objetivo posible, y para los gustos de uno la objetividad no existe, la trama está bien hilada, tiene algunos detalles excelentes (la parte de Bill está muy bien llevada, por ejemplo), pero no deja de ser una historia de un viaje en un mundo post-apocalíptico, donde apenas nada de lo que sucede sorprende. Hay algún giro que si está bastante bien, la casi muerte de Joel, que claramente no iba a acabar sucediendo y el final, donde este decide mandar a la mierda todo por lo que se ha jugado el cuello para salvar la vida de la niña a la que le ha cogido cariño, y mentirle mucho.

Sin embargo, aunque la trama en si no está mal (tampoco es algo que te vaya a cambiar la vida, pero no esta mal) tiene un lastre importante: el juego. La propia estructura del juego ya ha conseguido que pierda gran parte de mi interés por jugarlo, y ha conseguido algo peor, que el progreso de la trama sufra parones continuos que han terminado por hacer que el ritmo sea demasiado irregular.

Hay además algunos puntos que me chirrían, como que los personajes secundarios pasan muy fugazmente y apenas se desarrollan. Uno de los que más cojos me han quedado ha sido Tess, esa mujer con la que Joel comienza la aventura, que sabemos que es importante para él, hasta el punto de que cuando se infecta lo convence para que lleve a Ellie a los luciérnagas, algo que por lo que sabemos hasta ese punto de Joel no haría ni de coña, no le importa y no saca nada, pero por ella lo hace; pero quién demonios es Tess, apenas sabemos nada, apenas nos cuentan nada y todo queda a lo presupongamos.

En Pittsburgh conocemos a los dos hermanos, el pequeño acaba infectado y el mayor lo mata y luego se suicida. Esta escena parece querer que compartamos su sufrimiento, pero es que a estas alturas el juego ya ha conseguido que nadie nos importe, no solo apenas nos los ha presentado, sino que nos ha enseñado que la gente muere sin parar y ni siquiera a los protagonistas parece importarles demasiado, más allá del comentario de Ellie de vaya, tenía que haberles hecho una tumba no sufren demasiado por las muertes o no se paran a pensarlo; o lo hacen fuera de cámara.

Y así con cada secundario que aparece, el hermano de Joel, el tío canival, etc.

Y esta es mi opinión total y absolutamente subjetiva de The last of us, la repetición de la misma estructura acaba por cansar demasiado y rompe el ritmo de la trama continuamente, trama que está bien, pero tampoco creo que sea la gran maravilla que tantos dicen que es.

Left behind

Viendo lo visto con este juego, este DLC debería ser similar, ¿verdad? Pues sí, pero no. Tiene la misma mecánica para los encuentros, tiene el tema de registro en busca de recursos, y tiene las partes que mueven la trama, pero este pequeño DLC tiene un ritmo mucho más fluido que el juego original, cosa que su escasa duración facilita. También los encuentros son menos y algo más variados, por lo que no llegan a agotar como lo hacen en el juego principal.

Resumiendo, Left behind sí me ha gustado bastante.

Y esta ha sido mi opinión de mierda sobre este maravilloso y aclamado juego, otro día otra cosa.